¿Qué es el Síndrome Nefrótico?

¿Qué es el Síndrome Nefrótico?

El síndrome nefrótico es un cuadro caracterizado por pérdida de proteínas en la orina, secundario a un daño glomerular, ya sea ésta primaria o secundaria.

La causa más común en los niños es la enfermedad de cambios mínimos y la causa más común en los adultos en la glomerulonefritis membranosa. En los niños, es más común entre edades de 2 a 6 años. Éste síndrome se presenta con una frecuencia ligeramente mayor en los hombres que en las mujeres.

Esta afectación puede ocurrir como resultado de enfermedades sistémicas como ser diabetes mellitus, lupus eritematoso sistémico, amiloidosis, mieloma múltiple, infecciones (virus de hepatitis B y C, VIH) neoplasias o afectación glomerular (enfermedad de cambios mínimos, glomerulonefritis segmentaria y focal, glomerulonefritis membranosa, glomerulonefritis mesangiocapilar).

El cuadro está caracterizado por presencia de proteínas en orina en cifras superiores a 3,5 gramos al día, descenso de los niveles de proteínas en sangre, aumento de los niveles de lípidos en sangre y en orina asociado a hinchazón de los ojos, cara, pies y tobillos.

Para controlar el síndrome nefrótico se debe tratar la causa desencadenante. Los objetivos del tratamiento son aliviar los síntomas, prevenir las complicaciones y retrasar el daño renal. Se recomienda mantener la presión arterial en o por debajo de 130/80 mmHg para demorar el daño renal. Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) y los bloqueadores de los receptores de angiotensina (BRA) son los medicamentos que se emplean con mayor frecuencia en este caso. Éstos medicamentos pueden ayudar a disminuir la cantidad de pérdida de proteína en la orina. Se debe tratar los niveles altos de colesterol para reducir el riesgo de problemas vasculares y cardíacos. En éste caso se podrán usar estatinas. Una dieta baja en sal puede ayudar con la hinchazón en las manos y las piernas, asociado o no al uso de diuréticos. Las dietas bajas en proteínas pueden servir. El paciente puede requerir suplementos de vitamina D, ya que se pierde cantidades importantes por la orina. Se pueden requerir anticoagulantes para tratar o prevenir la formación de tromboembolismos.

Claudia X. Lazarte (MIR)
Servicio de Nefrología
Hospital General Universitario de Valencia.

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