Otra ponencia en el Primer Congreso del Grupo Español Multidisciplinar de Acceso Vascular
En el pasado Congreso del Grupo Español Multidisciplinar de Acceso Vascular, que se celebró en Barcelona los días 14 al 16 de noviembre, también participó Marta Poves, médico interno residente de 2º año, con una ponencia oral sobre nuestra consulta multidisciplinar del acceso vascular. La exposición la realizó de forma muy clara y le damos nuestras más sinceras felicitaciones.
Continuando con la descripción de esta iniciativa de trabajo en nuestro servicio, aportamos otros conceptos interesantes al respecto.
Recomendaciones sobre cuándo realizar la fístula arteriovenosa (FAV):
Se recomienda en los pacientes con enfermedad renal crónica progresiva considerar la creación del acceso vascular cuando el FGe < 15 ml/min/1,73 m2 y/o una estimación de entrada en diálisis en 6 meses.
Se recomienda que la fístula arteriovenosa nativa se realice con una antelación previa al inicio de la hemodiálisis de 6 meses.
Se sugiere que la fístula arteriovenosa protésica se realice con una antelación previa al inicio de la hemodiálisis de entre 3 y 6 semanas.
Se recomienda la realización del fístula arteriovenosa con carácter preferente en los pacientes con enfermedad renal crónica de rápida evolución, falta de maduración de la fístula arteriovenosa o portadores de catéter venoso central no tunelizado.
Recomendaciones sobre la localización preferente de la FAV:
Como primer acceso vascular se recomienda crear una fístula arteriovenosa nativa lo más distal posible, en la extremidad superior no dominante.
Tras agotar el acceso vascular radiocefálico a lo largo del antebrazo, se recomienda la fístula arteriovenosa nativa realizada con las venas disponibles a nivel de codo, siendo la fístula arteriovenosa humerocefálica o radiocefálica proximal la primera alternativa a considerar.
Si no se puede realizar una fístula arteriovenosa radiocefálica o humerocefálica, se recomienda la realización de una fístula arteriovenosa humerobasílica con superficialización o transposición venosa en el brazo o antebrazo, como opción previa a la utilización de una fístula arteriovenosa protésica.
Se recomienda que la fístula arteriovenosa protésica en la extremidad superior se limite a los siguientes supuestos:
- A. Pacientes sin venas anatómicamente adecuadas en el brazo o antebrazo.
- B. Pacientes que requieren hemodiálisis de modo inmediato y se quiere evitar la implantación de un catéter venoso central tunelizado.
Si ha fracasado una fístula arteriovenosa previa, se recomienda que la decisión del lugar anatómico de la creación de la siguiente fístula arteriovenosa sea consensuada con el paciente, para decidir si se da prioridad al criterio de cuanto más distal mejor o al criterio de extremidad no dominante.
En los casos en los que se han agotado los accesos vasculares a nivel de ambas extremidades superiores, se sugiere el empleo de las técnicas de recurso, priorizando la fístula arteriovenosa protésica a nivel de muslo y el dispositivo prótesis-catéter tunelizado como primeras opciones a considerar.
https://revistanefrologia.com/es-guia-clinica-espanola-del-acceso-vascular-hemodialisis-articulo-S0211699517302175
http://www.seden.org/files/rev49_1.pdf
Dra. Ana Mª Oltra. Coordinadora Blog Renal
Nefrología. CHGUV
Comentarios recientes