¿PUEDO TENER ANEMIA SI ESTOY TRASPLANTADO RENAL?

La anemia consiste en la presencia de una cantidad inferior a la habitual de glóbulos rojos en la sangre, cuya función es aportar oxígeno y nutrientes a los diferentes tejidos del organismo. Se diagnostica mediante el hallazgo en un análisis de laboratorio de una hemoglobina inferior a 13 g/dL en hombres y a 12 g/dL en mujeres.

Es un hallazgo frecuente en la población general siendo más habitual en pacientes con enfermedad renal crónica o en aquellos con un trasplante renal, donde su prevalencia aumenta en el periodo peri-trasplante (90%) y disminuye progresivamente durante el primer año post-trasplante (30-40%), si el paciente tiene un aloinjerto funcionante. El origen de la anemia post-trasplante varía según el tiempo transcurrido desde el trasplante y las características de cada paciente.

Los signos y síntomas de la anemia varían en función de su rapidez de instauración y gravedad. En ocasiones  son inespecíficos, dependiendo de las características de cada individuo y de la su adaptación al descenso de la hemoglobina. Entre ellos se encuentran la debilidad, la piel pálida y fría, la irregularidad de los latidos cardíacos, la tensión baja, los problemas para respirar, la sensación de mareo o aturdimiento, etc.

Existen muchos factores que influyen en el desarrollo de la anemia en los pacientes trasplantados. La edad (mayores de 65 años) y el sexo (mujeres) aumentan el riesgo de su desarrollo. Durante el periodo inmediato al trasplante, la anemia puede estar relacionada con el aumento de toxinas urémicas o con las pérdidas sanguíneas ocurridas durante la cirugía o el postoperatorio. Además pueden influir el déficit de hierro, de vitamina B12 o de ácido fólico. Se debe evaluar la ausencia de síntesis de eritropoyetina, el estado proinflamatorio, la presencia de rechazo o disfunción del injerto, la presencia de infecciones (parvovirus B19, Epstein-Barr virus, citomegalovirus, virus BK, virus varicela-zoster, tuberculosis, virus herpes y estafilococos). También lo pueden favorecer ciertos fármacos indicados en la inmunosupresión (micofenolato de mofetilo, azatioprina, ciclosporina, sirólimus, everólimus y temsirólimus) y en la profilaxis infecciosa (ganciclovir y trimethoprim-sulfamethoxazole).

Los receptores de un trasplante de riñón deben someterse a pruebas periódicas de detección de anemia durante y después del trasplante. Dicha evaluación debe incluir una valoración de las causas de anemia compartida con los pacientes no trasplantados, así como de causas más específicas que pueden ser exclusivas de los receptores de trasplante de riñón. Esto contribuye a aumentar la supervivencia y mejorar la calidad de vida de los pacientes,  con la supervisión profesional siempre teniendo en cuenta la idiosincrasia de cada paciente.

Dra. Marta Poves Gómez – R3 Nefrología

Dr. Sergio Bea Granell – Coordinador Blog paciente renal

Hospital General Universitario de Valencia

Bibliografia:
Kidney transplantation in adults: Anemia and the kidney transplant recipient. Authors:Daniel W Coyne, MD, Daniel C Brennan, MD, FACP, Andrew Malone, MB, BCh, MRCPI Section Editor:Christophe Legendre, MD Deputy Editor:Albert Q Lam, MD. UPTODATE.

Blog Escuela del Paciente Renal HGUV

La Escuela del Paciente Renal es un proyecto del Consorcio Hospital General Universitario de Valencía donde un grupo multidisciplinar compuesto por nefrólogos, psicólogos y nutricionistas tratamos aspectos de interés para pacientes con alguna patología renal o para aquellos que quieran conocer de una manera más profunda el mundo de la nefrología.

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