Vacaciones solidarias

Somos M. José y Beatriz, dos enfermeras del Servicio de Nefrología del Hospital General, que hace dos años decidimos tener unas vacaciones diferentes. Nuestro destino elegido fue India por tercera vez, pero en esta ocasión, cambiamos la mochila por el maletín, decidimos tener unas vacaciones solidarias y pasamos un mes en una casa de acogida de Nueva Delhi, ayudando a los más necesitados. Fue una experiencia dura y enriquecedora, a la que invitamos a nuestros colegas enfermeros a realizar alguna vez en su vida. Elegimos India al ser es un país que ya habíamos visitado, el cual nos encantaba a la vez que nos horrorizaba, la duras condiciones en que viven sus gentes fueron motivación suficiente para emprender aquella dura aventura. Nuestra maleta iba repleta de material donado por compañeros, medicinas, material escolar y muchas, muchas ganas de ayudar.

En la casa de acogida en la que estuvimos convivían niños, ancianos, jóvenes, toda clase de personas sin un hogar donde acudir ni un techo bajo el cual dormir, muchos de ellos acudían por propia voluntad, los niños en cambio eran recogidos de las calles o simplemente abandonados en la misma puerta del centro. Nuestra misión allí era principalmente realizar las curas diarias a todos los internos, enseñar cómo hacerlas al personal encargado, y salir dos veces por semana con un médico y una ambulancia a una de las zonas más deprimidas de New Delhi, donde realizábamos curas de lo más variopintas: atropellos por vacas, caídas de “ricksaw”, explosiones… la mayoría de nuestros pacientes eran indigentes y drogodependientes, que puntualmente acudían a su cita con el médico para recibir su medicación. Allí la prescripción era totalmente diferente a como la hacemos aquí, puesto que ellos difícilmente hacen 3 comidas al día, por lo que se ajustaban dosis diarias de medicación, se les suministraban las dosis justas para 3 días y así garantizar su vuelta el siguiente día y poder llevar un seguimiento de cada caso.

Regresamos a España fuertemente sensibilizadas sobre las desigualdades de salud en el mundo e intentamos trasladar nuestra experiencia al resto de compañeros. Desde entonces colaboramos activamente con una ONG de Calcuta y hemos conseguido que muchas de nuestras compañeras de servicio también lo hagan ya que cualquier ayuda desde España, por poco que sea, es muchísimo en India.

 

M. José Cob y Beatriz Mirabet