VI Cardio-Ren meeting

Del 26 al 28 de enero se ha celebrado el VI Cardio-Ren meeting en el Palacio de Congresos de Córdoba en formato presencial y streaming.

Esta reunión  ha sido avalada por la Sociedad Española de Cardiología, Asociación de  Insuficiencia Cardíaca , Grupo de Síndrome Cardiorrenal y tratamiento de la Congestión Cardíaca en la Insuficiencia Cardíaca, Asociación de Riesgo Vascular y Rehabilitación Cardíaca y el Grupo de Diabetes y Obesidad.

Se han tratado temas muy interesantes y de actualidad como las Novedades en nefro protección y Síndrome Cardiorrenal, el control del déficit del hierro en el paciente Cardiorenal  o la mesa que hacía referencia a la Nefropatía Congestiva.

He querido destacar las tres mesas que me parecieron más didácticas.


NOVEDADES EN NEFRO PROTECCIÓN Y SÍNDROME CARDIORRENAL

Papel de :

  • Inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa tipo 2: Los iSGLT2 se asocian con una disminución del 30 – 35% en el riesgo de hospitlización por insuficiencia cardiaca, mientras que otros hipoglicemiantes más potentes han fallado en reducir el riesgo cardiovascular, particularmente en lo que respecta a los desenlaces en insuficiencia cardiaca.Sus beneficios pueden extenderse a todo el espectro de la fracción de eyección. Además también han demostrado ser beneficiosos para enlentecer la progresión de la enfermedad renal crónica y reducción de la proteinuria.
  • Finenerona: Es un antagonista no esteroideo altamente selectivo del receptor mineralocorticoide que, a diferencia de los tratamientos actuales, podría disminuir directamente la inflamación y la fibrosis, aportando un valor añadido al abordaje de estos pacientes. De hecho, la finerenona disminuye la albuminuria y enlentece la progresión de la ERC en personas con diabetes.    Tiene beneficios cardiovasculares, sobre todo en insuficiencia cardiaca, en pacientes con enfermedad renal crónica diabética.
  • Sacubitril/Valsartan: Inhibidor de la neprilisina y del receptor de angiotensina (INRA), reduce el riesgo de muerte cardiovascular y de hospitalización por insuficiencia cardiaca (IC) y mejora los síntomas en pacientes con insuficiencia cardiaca crónica con fracción de eyección reducida  en comparación con enalapril, el estándar oro para el tratamiento de la IC.
  • Agonistas del receptor de GLP-1: Se necesitan más datos con respecto a los efectos de los agonistas del GLP-1 en pacientes diabéticos con insuficiencia cardiaca. Su uso puede ser adecuado para pacientes con diabetes mellitus con historia de IC en clase funcional NYHA de I a III.
  • Quelantes potasio: La Hiperpotasemia se ha identificado en el 3-18 % de los pacientes con insuficiencia cardíaca en ensayos controlados  y en más del 25 % de los pacientes con insuficiencia cardíaca en el  “mundo real”.  Los quelantes de potasio pueden ser la mejor opción en pacientes con HK para reducir las concentraciones séricas de K+ y promover actualizaciones correctas de las terapias.

¿NOS ESTAMOS EQUIVOCANDO AL EVALUAR EL DÉFICIT DE HIERRO?

El déficit de hierro es una patología común con especial relevancia en pacientes con insuficiencia cardiaca (IC). El hierro, esencial para la formación del grupo hemo, interviene en el metabolismo oxidativo y afecta a la producción celular de energía y, por tanto, a la funcionalidad de los miocitos y los cardiomiocitos. El DH puede presentarse con o sin anemia, lo que vuelve imprescindible su detección como un trastorno independiente. En la práctica clínica el DH en la IC crónica todavía está infradiagnosticado e infratratado, a pesar de que su prevalencia en los pacientes es alta.

En los pacientes con insuficiencia cardiaca crónica, el déficit de hierro, pero no así la anemia, se asociA con deterioro de la capacidad de ejercicio submáxima y limitación funcional sintomática.

NEFROPATÍA CONGESTIVA

La insuficiencia renal (IR) es una comorbilidad frecuente en el paciente con insuficiencia cardiaca (IC). La asociación de ambos trastornos se asocia a un peor pronóstico. Sin embargo, identificar los mecanismos fisiopatológicos implicados en el desarrollo de IR de nuestros pacientes puede ayudar a la optimización del manejo y tratamiento.

Tradicionalmente se ha considerado la disminución de la perfusión renal como mecanismo fisiopatológico predominante en el deterioro de la función renal en la IC. Sin embargo, varios trabajos han posicionado el aumento de la congestión venosa como factor determinante en el desarrollo del deterioro del filtrado glomerular en el paciente con IC, más allá que el índice cardiaco o la fracción de eyección.

 

«El aumento de la congestión venosa es un factor determinante en el desarrollo de deterioro de la función renal en el paciente con insuficiencia cardiaca»

De este modo, la nefropatía congestiva viene determinada por la elevación de la presión venosa central que sucede en la IC, pero también en otras patologías como la hipertensión pulmonar, la insuficiencia tricúspide o algunas cardiopatías congénitas. Este aumento de presión venosa se transmite directamente a las venas renales. Dado que el riñón es un órgano encapsulado con poco espacio para expandirse, este aumento de presión conduce a un incremento en la presión hidrostática renal que en estadios iniciales puede ser compensado mediante un aumento del flujo linfático. No obstante, la elevación persistente ocasiona una reducción del flujo venoso, linfático y finalmente del flujo arterial renal. Además, el aumento de la presión renal intersticial puede producir compresión a nivel de los capilares peritubulares y túbulos renales, resultando todo ello en una disminución de la reabsorción y secreción tubular y en la activación de citoquinas inflamatorias, del sistema renina-angiotensina-aldosterona y del sistema nervioso simpático. El resultado final es el deterioro del filtrado glomerular, el aumento de la reabsorción de sodio, y la sobrecarga de volumen que perpetuará el círculo vicioso.

Dado que la nefropatía congestiva es un subtipo potencialmente reversible de disfunción renal, identificar este fenotipo es especialmente importante, ya que una adecuada descongestión puede preservar e incluso mejorar la función renal en ausencia de enfermedad renal crónica previa grave o presencia de congestión o hipoperfusión de larga duración. Sin embargo, identificar esta entidad puede suponer un reto diagnóstico. Determinar el estado de euvolemia mediante exploración física, biomarcadores y técnicas de imagen pueden ayudar a determinar el factor predominante ante un posible deterioro de la función renal. La valoración del flujo venoso renal mediante ecografía renal ha mostrado correlación con otros parámetros diagnósticos, incluyendo parámetros hemodinámicos, por lo que se está posicionando como estrategia no invasiva para evaluar la congestión renal. La mejoría de la función renal tras tratamiento descongestivo con diuréticos u otras técnicas como la paracentesis también apoyarían el diagnóstico de nefropatía congestiva.

«La nefropatía congestiva es un subtipo potencialmente reversible de disfunción renal, en la que una adecuada descongestión puede preservar e incluso mejorar la función renal»,

 

Se define en esta revisión un fenotipo de disfunción renal cuya identificación y manejo con descongestión temprana puede mejorar la función renal y el estado del paciente con IC.

 

 

 

Fuente: secardiologia.es

 

Dra. Esther Tamarit Antequera

Nefróloga CHGUV

Coordinadora Blog Renal

Blog Escuela del Paciente Renal HGUV

La Escuela del Paciente Renal es un proyecto del Consorcio Hospital General Universitario de Valencía donde un grupo multidisciplinar compuesto por nefrólogos, psicólogos y nutricionistas tratamos aspectos de interés para pacientes con alguna patología renal o para aquellos que quieran conocer de una manera más profunda el mundo de la nefrología.

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